Ahora somos uno. Somos dos al mismo tiempo. Estas palabras con la voz de tu interior. Este ser con tu cuerpo.
Por un instante.

10/8/12

Descanso

El año se hizo siglo en un minuto. Corrí,
pero gateando. Como en los sueños.
Tenía la rapidez de una babosa
y la fuerza
de los bracitos
de un recien nacido.
La trompada
fue caricia;
la puteada
fue susurro.
Y la debilidad
que reside en la violencia
resultó evidente.


No hay comentarios: